Convivencias CJ!!!

En Agosto se llevaron a cabo las Convivencias de Mitad de Año del nivel I y II del Centro Juvenil.

El lugar al cual fuimos es el Instituto Loreto, en la Localidad de Benavidez.

El fin de semana del 10 tuvo lugar la convivencia con los más grandes (nivel II), donde compartimos la reflexión en un clima de compañía y encuentro. Cada grupo trabajó con temáticas acordes al itinerario que vienen transitando en la primer parte del año junto con sus animadores, pero apuntando entre los diferentes grupos, a lograr lo mismo: mirarnos a nosotros mismos, animarnos a compartir desde el corazón con los demás.

El sábado a la noche se realizó un festejo con música y baile y el Domingo Celebramos la Eucaristía junto con el Padre Juan Francisco.

El viernes 17 partimos nuevamente a Benavidez, pero en este caso con el nivel I, con casi 200 chicos entre la Sociedad de la Alegría (11 y 12 años) y Amigos/as de Domingo Savio (13 y 14 años), muy felices por la cantidad de chicos que esperaban poder disfrutar de la convivencia, toda la comunidad de animadores puso su mayor esfuerzo para prepararla y pensar qué hacer durante esos tres días, ultimando cada uno de los detalles.

Si bien el clima en su primer día no nos acompañó, logramos que todo saliera como si el sol brillara con mucha intensidad, y todos disfrutamos, reímos, reflexionamos, jugamos y aprendimos.

Junto con los ADS vivimos un momento muy lindo, donde los chicos aprendieron a cocinar pan y reflexionaron acerca de encontrar en ellos aquellas cosas buenas que ayudan a "hacer crecer" a los otros, en qué momentos somos "levadura" para los demás y en qué otros sentimos que los demás, nuestra familia, amigos, personas que nos quieren, son "levadura" para nosotros.

A los socios y las socias les tocó vivir un momento muy especial, donde se pudo fortalecer el sentirse parte de la SA, el ser “socio” como lo era Don Bosco en su momento. El compartir lo lúdico, lo expresivo a través de diversas modalidades artísticas le dio sentido a todo el fin de semana de compartir juntos. Tuvimos también un espacio de festejo y baile el sábado por la noche y el Domingo realizamos una Celebración de la Palabra y compartimos la Eucaristía y agradecimos el haber pasado una excelente convivencia, el poder ser felices teniendo amigos, familia y personas que nos acompañan y quieren, mostrando el valor del amor como central.

Estamos muy contentos y satisfechos con lo vivido estos fines de semana. Ninguna convivencia es igual, cada vez que uno vuelve a Benavidez lo vive de una manera distinta. Es un lugar donde podemos conectarnos con lo que nos pasa, de tener un momento de paz, de encuentro con el otro, de formar comunidad y sentirnos queridos y acompañados. Pasamos muchos momentos de diversión, ya sea con juegos, expresiones artísticas y deportes que nos ayudan a conocernos más entre todos. Las convivencias son muy especiales para el Centro Juvenil, ya que al pasar tres días juntos, los chicos pueden charlar con sus amigos, animadores, coordinadores y esto hace que se viva un clima distinto al de cada sábado, donde realmente sentimos una familiaridad, que como decía Don Bosco, engendra afecto y abre los corazones de los jóvenes, queriendo formar todos un solo corazón.

La alegría más grande es saber que los chicos se fueron contentos, con ganas de volver, como ellos nos dijeron "me voy con ganas de la próxima convivencia" porque sabemos que eso les hace bien, y es en la alegría inmensa que trajeron y manifestaron al bajar del micro lo que nos renueva el sentido de nuestro trabajo por ellos.

En un trabajo en conjunto y de articulación con el sector Secundario de nuestra Casa, con quienes compartimos muchos destinatarios, pusimos en marcha, como hace varios años atrás, la Convivencia 1° año – Centro Juvenil. Este año junto a su preceptor, su encargada de curso, Pablo Bellando, Mariano Busquet y varios coordinadores y animadores, compartimos una hermosa jornada en la Ciudad Deportiva Don Bosco. La misma se llevó a cabo en un lindo clima donde pudimos compartir, divertirnos, conocernos y reflexionar, pudiendo integrarnos entre todos generando pasos de camino compartido.

Por Ornella Vecchio

Fotos: Tomás Ramirez L.